Nació en la región del Cáucaso y de chica se formó en la música clásica estudiando en Kiev, capital de Ucrania, cuando todavía pertenecía a la Unión Soviética, en una escuela de "niños prodigio" del instrumento. Luego emigró a Polonia como refugiada junto a su familia y puso todas sus energías en la música. Se perfeccionó en Suiza, en un prestigioso Conservatorio y su vida dio un vuelco de 180 grados cuando escuchó un grupo de música andina en las calles de Alemania.
Fue entonces que decidió viajar a Sudamérica y se estableció en Ecuador, donde formó el Dúo Aquitania junto a un músico local. El pasado pasado el destino y sus ganas de conocer más del folklore la trajo a la Argentina, donde recaló en Tucumán. A los pocos meses, ya estaba participando en un homenaje a Mercedes Sosa en el mismísimo festival de Cosquín, como integrante de la delegación de la provincia.
"Me sorprendió la importancia del violín en el folklore local y sobre todo me llamó la atención la chacarera. Comencé a escuchar distintos intérpretes de violín y muy pronto me fascinó la ejecución de Nestor Garnica, con su osadía y virtuosismo. Aprovechando mi viaje a Cosquín me comuniqué con Nestor por teléfono, y enseguida me sentí muy gustosa con su trati, tan humano y humilde a pesar de su gran fama. Me invitó a participar en enero en La fiesta de violinero, pero no pude por un viaje que tenía que realizar". explica Kasakova.
Finalmente esta noche llegará esa posibilidad. "Parece que ahora se realiza este sueño y estoy muy emocionada y contenta por revelar mi forma de ser con mi violín", comenta.
Por los Senderosde Argentina